Galería Espacio Lobo
Exposición
Todas mis vidas posibles.
Fechas de inicio y cierre: 13.10.2022 – 22.11.2022
Artista: Marcela Lobo
Hubo un momento de su vida en que la naturaleza, de manera caprichosa, decidió llevárselo todo. Le arrancó objetos, y con ellos, parte de sus recuerdos. En su afán por recuperar el pasado, comenzó a coleccionar nuevas memorias. Así comenzó su obsesión por los objetos. Casi sin proponérselo, estos fueron configurando la vida de Marcela Lobo: su pasado y su presente, pero no fue, sino con el paso de los años, cuando todo fue cobrando su sentido.
“Todas mis vidas posibles” ha sido una excusa para adentrarnos en el universo objetual que hasta la actualidad ha ido configurando Marcela Lobo en su producción artística. Artesanías, juguetes, floreros, frutas, muebles, maniquíes, flores, jaulas, telas, peines, frascos de perfume y fragmentos de cerámicas, integran un escenario casi doméstico que nos hace viajar, desde la combinación de tonos autorreferenciales que posee, por la vida de esta autora. Pintura, escultura, cajas objetos, piezas de cerámica son dispuestas en el espacio como muestra de la versatilidad que le caracteriza. Si bien su faceta pictórica ha sido una de las más reconocidas – y está presente en la exhibición- , esta vez cobran protagonismo, de igual modo, otros medios en los que se evidencia su expansión creativa, como es el caso de expansión hacia lo tridimensional de sus obras.
Y es que no podemos hablar de lo simbólico, del tiempo y la memoria en la producción de Marcela Lobo sin hacer referencia a sus cajas – objetos. Cual universos detenidos en el tiempo, termina por devolverles la emoción y la delicadeza. En el interior de cada una, por demás diferentes entre sí, podemos descubrir infinitud de piezas provenientes de sus viajes, de casas de antigüedades donde ha ido recopilando frascos, zapatillas, juguetes de plástico, cartas, telas, fotografías, figurines, muñecas, fracciones de maniquíes, juegos de té, entre muchos otros fragmentos. En ellas adquieren un nuevo sentido, una nueva narración, configuran otras historias. Recuerdos que agrupa haciendo suyos, pero también convirtiéndolos en nuestros.
Los objetos toman vida propia, nos narran su memoria, pero también se tornan en lugares comunes en los que reconocernos, y todo toma sentido. Con sus guiños a diferentes etapas por las que, como individuos, transitamos, a objetos que pueden haber definido nuestras vidas; es posible en sus piezas establecer algún tipo de conexión afectiva.
Ese propio universo es el que descubrimos en sus pinturas. La selección de piezas en “Todas mis vidas posibles” hace un recorrido por la vocación doméstica que ha documentado, en una revolución de imágenes superpuestas y con un estallido de colores que le caracteriza. Los propios títulos de las obras nos guían en lo que pudiéramos definir como una bitácora de viaje en sus referencias al hogar, a lo doméstico, a lo familiar que además expande a objetos que crea con sus propias manos: zapatos, jarrones y platos de cerámica.
Marcela Lobo indaga así en la capacidad poética de lo objetual, desde lo pictórico hasta lo matérico en sí mismo. Más que objetos que conviven dentro de ese universo complejo, diverso, fauvista, la artista va reconstruyendo su vida, y con este gesto nos invita a re-descubrirnos en ella.